Maite Pinto

La práctica artística de Maite Pinto se centra en la memoria y la identidad, tanto individual como colectiva, a través de la recuperación de instantáneas obtenidas de los archivos más diversos, tanto privados como públicos, que la autora recrea mediante la técnica del grabado. Estas obras se centran en las fotografías de algunos de los miles de menores vascos que se vieron obligados a dejar sus hogares y fueron enviados a Southampton (Reino Unido) en el vapor Habana en 1937. En este contexto de desplazamiento, fragmentación y pérdida, las imágenes nos hablan de la necesidad de pertenencia a un colectivo, y de cómo ese sentimiento de grupo ha llegado hasta nuestros días a través de la labor documental de la Association for the UK Basque Children, poniendo así de relieve el impacto que aquel hecho tuvo en sus vidas.