También en Alemania, en Worpswede, no lejos de Bremen, se estableció en 1889 una colonia de artistas. Sus componentes se retiraron allí huyendo de la creciente industrialización de las ciudades y anhelando reencontrarse con la naturaleza en su estado más puro, que representaron de manera idealizada, con un tono a menudo melancólico y también de celebración de la vida rural. El hecho de que rechazaran cualquier tipo de influencia externa motivó discrepancias entre Paula Modersohn-Becker (1876−1907) y los demás pintores del grupo de Worpswede. Ella nunca estuvo totalmente de acuerdo con las convenciones establecidas por el grupo y enseguida integró en su arte las influencias que descubrió en París. Eligió expresar la naturaleza elemental a través del tema de la maternidad y, al hacerlo, se convirtió en la primera artista que se representó desnuda en un autorretrato.
Poco después de su prematura muerte, acaecida en 1907, Gustav Pauli organizó una exposición para rendirle tributo en la Kunsthalle Bremen, que, como muestra monográfica dedicada a una mujer artista, constituyó en aquel entonces una iniciativa absolutamente pionera.
Paula Modersohn-Becker
Anochecer en el campo, con casa y horcadura, ca. 1900
Témpera sobre cartulina, 42,5 x 55,7 cm
Kunsthalle Bremen - Der Kunstverein in Bremen.
Adquirido en 1967