Estos contenidos pretenden ayudar a comprender y visualizar algunas de las preocupaciones recurrentes en la trayectoria del artista en torno a energías y procesos invisibles: Orientación, Gravedad, Transformación, Tiempo o Espacio son temas presentes en las obras que articulan la exposición. A través de su elección de materiales y de su singular puesta en escena, Anselmo pretende que seamos conscientes de las fuerzas y procesos a los que asistimos o que experimentamos, incluso sin percatarnos de ello.
GRAVEDAD
A escala macroscópica, la fuerza gravitatoria hace que los planetas orbiten alrededor del Sol y, en el caso de la Tierra, posibilita la existencia de vida. A una escala menor, la fuerza de la gravedad sobre este planeta es la que hace que los objetos caigan al suelo y determina nuestro movimiento sobre la superficie, manteniéndonos con los pies en la tierra.
¿Sabía que la gravedad retiene la atmósfera alrededor del planeta?
TRANSFORMACIÓN
La antracita es resultado de un proceso de transformación extraordinariamente lento. La materia orgánica de hace millones de años, sometida a una gran presión, temperaturas extremas y falta de luz, se compacta y solidifica a lo largo del tiempo, hasta que finalmente se convierte en roca. Con este tipo de carbón, Anselmo nos invita a reflexionar sobre el paso del tiempo y los imperceptibles cambios que experimentamos todos los días. Observe el microhábitat en la vitrina cercana e imagine la paulatina transformación que sufrirá con el paso del tiempo.
¿Sabía que nuestros cuerpos están en constante transformación y que todas nuestras células se renuevan cada siete años?
ESPACIO
“Ultramar” fue el nombre que se le dio a un tono profundo de azul que procedía de países lejanos o de ultramar. Originariamente el color se lograba moliendo lapislázuli traído del norte de Afganistán. En la obra de Anselmo, el pigmento ultramar alude a una visión infinita del mundo que nos conecta con aquello que está más allá.
¿Sabía que en el Renacimiento el pigmento ultramar era más caro que el oro?
ORIENTACIÓN
Con la ayuda de una brújula podemos visualizar la fuerza magnética, que de otro modo resultaría invisible e imperceptible para los seres humanos. El magnetismo atraviesa las barreras físicas de cualquier habitación, galería o espacio cerrado, por lo que incluso en un interior resulta posible localizar el norte. En la vitrina cercana, gracias al polvo de hierro, se puede visualizar la línea magnética generada por el imán.
¿Sabía que las palomas mensajeras encuentran el camino de vuelta gracias a su capacidad para sentir los campos magnéticos terrestres?