CRISTINA IGLESIAS

Sin título (Habitación de alabastro)

Perteneciente a una generación de escultores españoles que adquirió fama internacional durante la década de 1990, Cristina Iglesias crea grandes estructuras minimales que articulan un delicado equilibrio entre lo físico y lo visual. Es característica de su obra las imponentes formas hechas en cemento, hierro o aluminio, yuxtapuestas con superficies de intrincado labrado (a menudo trabajadas con ceras y pátinas de gran riqueza) y materiales suntuosos como el cristal, el alabastro y los tapices. Preocupada por la forma y el espacio según se presentan en la naturaleza, Iglesias crea sus propios paisajes escultóricos reducidos. Sus esculturas exentas, toscamente labradas aunque delicadamente modeladas, en su mayoría están construidas a escala humana, a pesar de sus considerables dimensiones, y sus apéndices arquitectónicos de variada composición generan un diálogo con el espacio circundante, invitando al espectador a moverse alrededor de ellos. Iglesias describe su obra como "pensamientos, lugares desde donde uno ve, espacios a medio camino entre la realidad y la imagen, entre la presencia y la representación, espacios que hablan de otros espacios".

Sin título (Habitación de alabastro) está constituida por tres marquesinas curvas de finas láminas translúcidas de alabastro blanco sujetadas por una estructura de hierro y colgadas de la pared de la sala a una altura algo superior a la del cuerpo humano. Al igual que ocurre en gran parte de la obra de Iglesias, la luz ambiental y el espacio son elementos fundamentales de la obra como materiales físicos. Aquí, la luz genera un suave resplandor a través de las láminas de alabastro que imbuye a las marquesinas de cierta inmaterialidad y altera ligeramente la percepción del espacio trazado debajo de ellas.